Vicente Bello
El PVEM sí votaba en contra del Fobaproa
Cuando, aquel sábado 12 de diciembre de 1998, el Pleno de la Cámara de Diputados puso a discusión el decreto por el que se expedía la Ley de Protección al Ahorro Bancario y diversas reformas a las leyes del Banco de México, de Instituciones de Crédito, del Mercado de Valores y para regular las Agrupaciones Financieras, así se posicionaban los partidos políticos de entonces:
Verónica Velasco Rodríguez, diputada del PVEM: “El Partido Verde Ecologista de México siempre ha mantenido una postura congruente en torno al rescate bancario y su instrumentación a favor del Fobaproa. En un sentido de responsabilidad como partido político con la sociedad, presentamos una propuesta el pasado agosto, propuesta que nunca fue escuchada por las autoridades hacendarias, quienes supuestamente se encontraban dispuestas a analizar a fondo todas y cada una de las opiniones de los diferentes partidos políticos.
“Hoy, como siempre, nos manifestamos en contra por la forma en que se violó el artículo 74 en su fracción IV de nuestra Constitución Política, al contratar deuda pública sin el consentimiento de la representación nacional: la Cámara de Diputados.
“Nunca estuvimos de acuerdo en la iniquidad del rescate bancario. Preguntaría yo entonces, ¿a quién se benefició, a 550 familias? El hecho de que haya mil 325 créditos superiores a 20 millones de pesos y concentren más de 140 mil millones de pesos, nos habla de que nunca hubo tal protección a los pequeños ahorradores y en cambio deja bien clara la enorme discrecionalidad y corrupción con que se manejó el Fobaproa. ¿Es ésta la mejor opción?
“En una de mis primeras intervenciones ante esta honorable tribuna expresaba que yo formaba parte de una generación que había nacido y crecido en un país con crisis económicas, una generación que empezaba a cuestionar las causas de éstas. Hoy esta decisión alcanzará inevitablemente a los mexicanos de las siguientes generaciones.
“Es inaceptable para nuestro partido que esta operación, la cual consideramos ilegítima, inequitativa e injusta, vaya a ser convalidada el día de hoy. Estamos en contra de la impunidad de esos pocos beneficiarios del saneamiento financiero. Estamos en contra de la iniciativa a discusión porque creemos que no solucionará el problema financiero en el que se encuentra nuestro país y se elimina la oportunidad de acotar la discrecionalidad con que se maneja la economía nacional y fortalecer el equilibrio de poderes. Finalmente nuestro sistema financiero sigue en una profunda crisis.
“Nuestro voto es en contra por razones de fondo; en la iniciativa se siguen dando garantías públicas amparadas en el Presupuesto de Egresos de la Federación a la deuda del instituto. Aunque se trata de disminuir el costo fiscal con las aportaciones futuras de los bancos, en caso de que tuviésemos otra emergencia financiera se repetiría la historia, al tener que intervenir el erario público para salvar nuevamente a los bancos.
“Nuestro voto es en contra porque no se resuelve la peor de las operaciones del Fobaproa: la nación sigue siendo deudora de los bancos, y no los bancos deudores de la nación.
“Adicionalmente, en el artículo quinto transitorio no se proponen incentivos explícitos para que los bancos inicien una verdadera recuperación efectiva de los créditos. El costo de este rescate, 15.7 puntos del producto, no ha beneficiado ni beneficiará a la población mexicana. Sus costos ya están aquí, al tener el gasto programable más bajo de la historia moderna de este país. Su costo, que tendremos que pagar cuando menos dos generaciones de mexicanos, nos limita la oportunidad de desarrollarnos como país”.
“Hoy el horizonte para todos los jóvenes mexicanos se acorta y desde ahora sabemos que les dejaremos un país más pobre, más desigual y con muy pocas oportunidades de crecimiento para nuestros hijos.
“No hay una explicación convincente para votar a favor, se deja la rendición de cuentas para mañana. El mejor ejemplo es que no se han iniciado las auditorías, y el gobierno se sigue negando aún a dar información.
“Con este acuerdo hay ya muy pocas esperanzas de castigar los actos de corrupción y mala fe y en cambio se garantiza la impunidad.
“En el Partido Verde Ecologista de México, aspiramos a un mejor país, un país con justicia e igualdad de oportunidades, con un gobierno que establezca como prioridades aquellas que demanda la población.
“Nuestro voto es en contra porque se ha malogrado la oportunidad histórica de llegar a arreglos institucionales importantes y tan sólo se logró llegar a un acuerdo parcial.
“Aun y cuando al final del día el resultado no nos convenciera, el Partido Verde Ecologista de México reitera su lucha incondicional por un mejor México”.
Debe corregirse lo que en este espacio se publicó la semana pasada, respecto de que el PVEM votó en favor de cambiar la deuda privada en deuda pública, el sábado 12 de diciembre de 1998. Una disculpa. En realidad, el PVEM votó en contra. Aquella vez, los únicos partidos que votaron en favor de transformar deuda privada en deuda pública, fueron PRI y PAN.
El IPAB fue aprobado con la siguiente numeralia: PRI, 226 votos en pro; PAN, 99 en pro. En total, 326 votos.
En contra, fueron sumados 158 votos, los cuales 124 fueron del PRD de entonces; los cinco diputados del PVEM votaron en contra; los cinco diputados sin partido votaron en contra. Y también en contra votaron siete diputados del PRI, 11 del PAN y los seis diputados que integraban la bancada del PT. (Continuará)