Garantiza “mayor enfoque a procesos y controles”
Su dependencia emitirá el Programa Anual de Fiscalización
Ciudad de México, Enero 05´2025. Agencia Reforma.- La Secretaría Anticorrupción y Buen Gobierno, que encabeza Raquel Buenrostro, dio a conocer ayer quienes ocuparán los principales cargos en la recién creada dependencia federal.
Guadalupe Araceli García Martínez, administradora general Jurídica del Servicio de Administración Tributaria (SAT), estará al frente de la subsecretaría Anticorrupción y Alejandro Encinas Nájera, ex subsecretario de Comercio Exterior e hijo del ex subsecretario de Derechos Humanos Alejandro Encinas Rodríguez, encabezará la subsecretaría de Buen Gobierno.
En el reglamento de la nueva dependencia, publicado el pasado 31 de diciembre, se establece que corresponde a la subsecretaría Anticorrupción emitir el Programa Anual de Fiscalización y «ordenar, por sí o por medio de las unidades administrativas a su cargo, la ejecución de los actos de fiscalización previstos en el Programa», entre otras funciones.
A la subsecretaría de Buen Gobierno, en tanto, le corresponde «coordinar la conducción, aplicación y verificación del cumplimiento de la política general de contrataciones públicas, de recursos humanos, participación social, evaluación de confianza, así como de prevención a la corrupción y mejora continua de la Administración Pública Federal».
Otros de los nombramientos anunciados por la Secretaría son los de Omar Sánchez Villegas en la Unidad de Combate a la Impunidad; María Guadalupe Arciniega García, en la Unidad de Contrataciones Públicas; Marco Antonio Flores García, en la Unidad de Políticas para el Servicio Público, y Alejandro García Ravizé Guízar en la Unidad de Innovación de la Gestión Pública.
Leticia Toxtli Miranda, Alejandro Galicia Avilés y Pilar Hernández Trinidad encabezarán las tres unidades de Vigilancia con las que contará la dependencia, mientras que Perla Amorene Anaya Díaz se desempeñará como coordinadora general de Órganos Internos de Control.
«La Secretaría Anticorrupción y Buen Gobierno tiene la misión de prevenir, detectar y sancionar actos de corrupción, dando un mayor enfoque a los procesos y controles que aseguran la eficacia, eficiencia, economía y transparencia de la Administración Pública Federal, fundamentales para garantizar la confianza ciudadana y promover un gobierno más ético y responsable que dignifique el servicio público», indicó la dependencia.